lunes, 22 de septiembre de 2014

Pruebas que producen Fe.

¡Debemos crecer en la fe! Es el llamado que Dios heces a todos los que hemos decidido seguirle. 

Como creyentes que quieren servir a Dios, debemos buscar que la gente crezca en fe, y una manera de hacerlo, es ayudarlos a entender las pruebas que confrontan. 

Hay 3 cosas indispensables que se necesita entender para crecer en fe en medio de las pruebas:


1) Aun como creyentes pasamos por pruebas. 

Jn. 16:33 "Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo" 

2) Los creyentes crecemos cuando pasamos por pruebas.

Santiago 1:3. "...sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia"

3) Los creyentes saldremos triunfantes de las pruebas 

Ro. 8:31-37 31 ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas? ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica. ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros. ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada? Como está escrito: Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; Somos contados como ovejas de matadero. Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.. 


Encuentren a alguien que esta pasando por pruebas y con disposición escuchalos, animales y ayudales. Comparte tu historia, ¿cómo entender estas verdades te ha ayudado a crecer en tu fe? 

Amados hermanos, cuando tengan que enfrentar problemas, considérenlo como un tiempo para alegrarse mucho porque ustedes saben que, siempre que se pone a prueba la fe, la constancia tiene una oportunidad para desarrollarse. Así que dejen que crezca, pues una vez que su constancia se haya desarrollado plenamente, serán perfectos y completos, y no les faltará nada. -Santiago 1:2-4 NTV-